martes, 20 de marzo de 2012

Zoques



Zoque: O’ de püt 

1. HISTORIA ZOQUE 

En la región donde se desarrollan hoy en día los Zoques se han encontrado, mediante los estudios arqueológicos, evidencias de ocupación pre cerámica en la depresión central de Chiapas, los cuales datan de alrededor del año 3 500 a. C. 

Estos restos sugieren que los primeros habitantes de esta región eran cazadores, pescadores y recolectores nómadas. 

Los zoques son descendientes de los olmecas que emigraron a Chiapas y Oaxaca. 

En la época prehispánica, los zoques habitaron una amplia zona de Chiapas, extendiéndose hasta el Istmo de Tehuantepec y parte del estado de Tabasco. Tuvieron buenos tratos sociales y comerciales con los Mexicas, lo que ayudó a la prosperidad económica de su cultura en Chiapas. 

Las jefaturas zoques anteriores a la llegada de los españoles, debido a las incursiones de grupos mayas, zapotecos y chiapanecos redujeron su territorio y los sometieron al pago de tributo. 

La capital de una de las principales tribus zoques era Quechua, actualmente bajo las aguas de la presa de Malpaso. 

La casta guerrera tuvo como capital a Janepaguay en los valles de Ocozocuautla y La Ciénega. En el desaparecido municipio de Francisco León (enterrado por la erupción del volcán Chichonal) se encuentran las ruinas de Gualeguas, antigua ciudad zoque. Otra jefatura zoque se asentó en el actual Cunduacán, Tabasco. 



El área de expansión de los zoques en la época precolombina, comprendió la costa de Chiapas hasta Guatemala, el Istmo de Tehuantepec, el sur de Veracruz, el suroeste de Tabasco y el centro noroccidental de Chiapas. 

Los zoques que poseían las tierras más codiciadas, como los que habitaban en la depresión central, cercana a Tuxtla Gutiérrez y en los valles occidentales, adoptaron rápidamente el castellano y los valores y costumbres del grupo dominante. La Corona española sometió a los zoques a los trabajos más pesados y los concentró en aldeas. Por el trabajo forzado y las enfermedades recién adquiridas, los zoques disminuyeron drásticamente en número. 

En la depresión central, los españoles se dedicaron principalmente a la cría de ganado y al comercio de cochinilla, algodón, azúcar y cuero, dejando a los zoques el trabajo agrícola y las actividades tradicionales, como el tejido de mantas, en el cual alcanzaron gran perfección. Los malos tratos y el trabajo forzado originaron descontento entre la población zoque, dando origen a incidentes de rebelión que fueron sofocados por las tropas de los colonizadores. 

La Independencia significó para la población zoque un nuevo periodo de explotación y trabajo forzado, al servicio de nuevos amos, mestizos y laicos. Durante el siglo XIX se promulgaron leyes que favorecieron la concentración de la tierra en pocas manos, formándose así una clase de grandes propietarios agrarios en la región que mantuvieron a los indios en condiciones de servidumbre en las grandes haciendas. 

Muchas de las leyes de reforma del siglo XIX fomentaron la concentración de la tierra en manos de una clase de grandes propietarios que mantuvieron a los indios en condiciones de servidumbre en las grandes haciendas. La recomposición del estado mexicano en estados federados contribuyó además a la fragmentación étnica, y la etnia zoque fue una de las fragmentadas por la división política territorial al dividirla entre los estados de Chiapas, Tabasco, Oaxaca y dejar a los zoque-popolucas en el estado de Veracruz. 

A partir del reparto agrario iniciado después de la Revolución mexicana, los zoques entraron en un proceso de "integración" a la cultura nacional. Aunque ha disminuido notablemente el número de hablantes de zoque se mantiene viva la vida ritual y ceremonial de estos pueblos. 

El clima de violencia e inestabilidad política de principios del siglo XX también afectó a la etnia zoque, aunque más tarde el posterior proceso agrario y las políticas educativas con carácter integracionista instrumentadas por el estado favorecieron su desarrollo. 

Fue hasta 1922 cuando se les dotó de ejidos y mejoraron un poco sus condiciones de vida, pero el período posrevolucionario supuso el intento de 'integración' de los indios en la sociedad y cultura mexicanas, lo que disminuyó el número de hablantes de la lengua zoque. 



2. UBICACIÓN GEOGRÁFICA 



El actual territorio de los zoques en el estado de Chiapas está comprendido en tres zonas específicas: la vertiente del Golfo, la Sierra y la Depresión Central, aunque debido a la movilidad geográfica del grupo, esta localización no puede tomarse como definitiva. 

En la vertiente del Golfo de México los indígenas zoques se concentran en los municipios de: 



· Amatán, 

· Chapultenango, 

· Francisco León, 

· Ixhuatán, 

· Ixtacomitán, 

· Ostuacán, 

· Solosuchiapa 

· y Tapilula 





En la Depresión Central se encuentran los de: 



· Copainalá, 

· Chicoasén, 

· Ocozocoautla 

· y Tecpatán 





Y, finalmente, en la sierra Madre de Chiapas en los municipios de: 



· Coapilla, 

· Ocotepec, 

· Pantepec, 

· Rayón 

· Tapalapa 





Este territorio, ubicado en la región centro-occidente del estado, se caracteriza por tener una variada vegetación que incluye desde sabanas tropicales, hasta bosques de hojas perennes con clima templado. 



Los poblados con mayor número de población zoque, como Pantepec, Tapalapa, Ixtacomitán, Chapultenango, Coapilla y Ocotepec, tienen acceso por caminos de terracería y brechas. 

3. LENGUA 

Los zoques, tzoque, soque o zoc se llaman a sí mismos O' de püt que significa "gente de idioma", "palabra de hombre" o, en otros términos, "verdadero", "auténtico". 

Es hablado por alrededor de 70 mil personas. 

La lengua indígena utilizada por este grupo es el zoque, la cual pertenece a la familia lingüística mixe-zoque-popoluca. 

En la actualidad encontramos muy pocos pueblos con mayoría de hablantes de esta lengua, tales como: Ocotepec y , Tapalapa municipios en donde la lengua zoque aún es aprendida por niños, mientras que en Chapultenango, Pantepec y Francisco León el sistema primario que adquieren los niños es el español por lo que ahora únicamente los adultos son los que se comunican en la lengua zoque, lo cual comienza a desarrollarse un alto grado de bilingüismo. 

En los otros municipios tales como Copainalá, Tecpatán, Tapilula, Coapilla la lengua zoque casi está desaparecida pudiéndose encontrar algunos hablantes solamente que son ancianos. 

En el municipio de Jitotol se encuentran comunidades que hablan la lengua zoque y que la población se identifica como tal, estos son: Ignacio Altamirano, Amor de Dios, San José, Ejido Cálido, San Antonio Buena Vista, Paraje San Antonio, El Amate, Santa María. 

Asimismo, las diferentes religiones que profesan los hablantes zoques han incidido en las distintas posturas ideológicas que cambian el pensamiento indígena y que traen, como consecuencia, la pérdida de identidad en el uso de la lengua, por ejemplo en las ceremonias religiosas zoques. En este aspecto, es importante mencionar que en el municipio de Ocotepec, en algunas comunidades como San Marcos, las oraciones las dicen en lengua zoque, pero los rezos son propiamente de la religión católica y lo único que hacen los rezanderos es la traducción del español al zoque. 



4. FIESTAS 



Las fiestas tradicionales de los zoques se mantienen y realizan con mayor suntuosidad y organización en las áreas urbanas (como Tuxtla Gutiérrez y Ocozocoautla) que en las rurales. Esto se debe a que en el contexto urbano, la celebración de la fiesta ha alcanzado un estatus más alto que en otras localidades, además de que existen mayores recursos económicos para realizarla. 

Cada localidad celebra al santo de su advocación y algunas otras fiestas católicas de importancia, como el día de la Candelaria (2 de febrero), de los Santos Reyes (6 de enero) y el Carnaval, cuya fecha varía, y puede durar hasta una semana. En todas ellas hay danzas, bailes, música, misas y procesiones efectuadas por los propios habitantes de la localidad o por grupos especializados, como el del barrio de Santa Ana, Copainalá que lleva a cabo presentaciones dentro y fuera del municipio, tanto en ocasiones rituales como en festivales de danza folclórica. 

La unidad social tiene como centro la familia, parientes y compadres que ayudan en la actividad agropecuaria. 

La unidad social es la familia extensa, que colabora en las actividades agropecuarias en las cuales participan también los parientes ceremoniales (padrinos y compadres), quienes deben ser de la misma localidad. 

En el bautizo el niño, por ejemplo, recibe un nombre igual al de una familia de una generación anterior, el cual viene a ser su “remplazo” dándole además del apellido paterno el del barrio de pertenencia. Sin embargo, en la actualidad se da al niño el nombre que le corresponde de acuerdo al santoral católico. 

El matrimonio es concertado entre los padres de los contrayentes. El pedido de la novia lo hace un “embajador”, persona de edad. 

Los padres del novio están obligados a visitar varias veces a los de la joven, llevándoles regalos, hasta que se otorga el consentimiento y se fija la fecha de la boda. La residencia pos matrimonial es de tipo patrilocal. En el presente es de cada vez más usual el rapto de la novia, olvidándose de esta manera el honroso sistema de regalo. 

El compadrazgo, tanto en lo que concierne el bautizo como en la boda establece fuertes vínculos de solidaridad mutua, mayores a los que corresponde a la relación padrino-ahijado. 

5. VESTIMENTA 



El traje del hombre zoque consiste de una camisa blanca de mangas largas y manta conocida usualmente como calzón, un cinturón de colores tejido a mano, un gran sombrero plano, un pantalón corto de gamuza usado sobre los calzones y sandalias de cuero (caites). 

La camisa del hombre zoque esta tejida con hilo blanco en una sola pieza 

Aunque algunos hombres aun poseen un juego de ropa tejida a mano, muy poco se teje en la actualidad. 

Se acostumbra rasurarse la parte superior de la cabeza. 

El vestido de la mujer 

El vestido tradicional se conserva fundamentalmente 

El vestido tradicional consiste en un refajo o falda larga de popelina de diversos colores; una blusa de manga corta, generalmente de color blanco, con bordados a mano en el cuello. 

En Tuxtla Gutiérrez, la mujer zoque utiliza, en las fiestas de la mayordomía, el antiguo vestido que consta de un huipil blanco corto, tejido a mano y una blusa, del mismo color. 



6. ECONOMÍA Y ALIMENTACIÓN 



La agricultura es la actividad económica fundamental de los zoques. Por la diversidad de climas, los cultivos son muy variados, predominando el maíz, chile, frijol, y calabaza para constituir la base de alimentación, la quese complementa con diversos insectos como la oruga. La escasez de tierras cultivables y la mala calidad de la mayoría de los suelos, originan que la producción sea deficitaria en casi toda la región. 

Los cultivos comerciales son el café, que se produce en varios municipios; el cacao y la pimienta gorda, que se explotan en copainala y tapalapa, respectivamente. 

Los frutales como plátano, mamey, anona, y guayaba proporcionan también algunos ingresos. El barbasco, tubérculo silvestre del cual se extraen ciertas hormonas, se recolectan principalmente en chapultenango y se vende a proquivemex (productos químicos vegetales mexicanos), pero su producción ha decrecido por falta de mercado. 

La ganadería vacuna esta poco desarrollada entre los indígenas y los pocos pastizales existentes son aprovechados por los mestizos. Predomina la ganadería porcina, teniendo cada familia dos o tres cerdos cuando menos, así como la cría de gallinas. 

En algunos municipios la tenencia de la tierra es fundamentalmente de carácter ejidal y en otros prevalece la propiedad privada. 

Aun cuando nominalmente la parcela es amplia y puede llegar a diez o doce hectáreas, de ellas solo dos o tres son cultivables y muchos zoques carecen de tierra. Esta situación aunada a la baja productividad, obliga a que parte de los nativos tengan que buscar un trabajo asalariado en las plantaciones de café y en ciudades aledañas. 

Entre las comidas que consume la comunidad zoque encontramos: 



· sispola (cocido), 

· puxase (chanfaina), 

· ningufjuti (mole de puerco), 

· sihuamonte (caldo de conejo). 

· Caldo de shuti (caracol de rio) 

· patashete con huevo, 

· moni (hongo blanco) 

· tamales de jacuane, 

· de hoja de milpa, 

· tamal de chipilin, 

· pictes de elote, 

· canane y 

· ane (tortilla). 



Las bebidas: 



· pozol blanco (popo hujcuy) 

· pozol de cacao (caca hujcuy), 

· nono (atole), 

· fuerte (aguardiente), 

· Agua 





Dulces: 



· pixinu (sorgo reventado con miel), 

· yumi (raíz parecida al camote), 

· tsani-tsunu (dulce de guineo), calabaza en dulce, 

· melcocha (de panela), 

· caballito, 

· jammani (jobo), 

· yono (cupape en dulce), 

· nucuyati (chincuya) 

· y coyol en dulce. 






7. VIVIENDA 



La vivienda tradicional es de techo de zacate, paredes de bajareque y piso de tierra. Actualmente ésta sólo se encuentra en las rancherías más alejadas, ya que ha sido sustituida por construcciones de lámina, cemento, tabique y piedra. Las casas cuentan con un patio o solar donde se cultiva una gran variedad de frutales: mangos, limones, naranjas, anonas, plátanos, flores y plantas de uso medicinal y culinario. 

Generalmente, las casas casi siempre son rectangulares y constan de uno a dos cuartos que tiene un anexo más pequeño usado como cocina. 

En el cuarto de mayor tamaño se encuentran las camas hechas de madera, usándose para dormir, hamacas o petates. En el propio cuarto se localiza un altar, construido con una tabla, sobre la que se coloca la imagen del santo tutelar y pajas también de madera en las que se guarda la ropa y con frecuencia las mascaras que se utilizan durante las danzas en que se celebran las festividades religiosas. El otro cuarto sirve como comedor y para recibir a las visitas. 





8. RELIGIÓN 



En la cosmogonía de los zoques, el sol juega un papel importante ya que es la deidad principal y se asocia directamente con Jesucristo. Existen entidades malignas que en todo momento amenazan la vida de los zoques y hay que estar preparado respecto a ellas y saber cómo evitar su ira. Así, por ejemplo, cualquier caída al suelo se interpreta como un intento del "dueño de la tierra" por apoderarse del alma de la persona; o bien, deben protegerse durante el sueño, ya que en dicho estado, el alma del zoque vagabundea libremente, y el espíritu de la noche está al acecho con el fin de "robársela", dejando al cuerpo sin alma. El diablo, aunque es una entidad católica, se asocia con distintos espíritus del mal, que encarnan en animales. 

Encontramos tres grupos religiosos entre los zoques: los católicos, los adventistas o protestantes y los que se reconocen como "costumbreros". Existe un rechazo y una falta de reconocimiento de unos a otros, lo que propicia conflictos por la obtención de poder. 

Es importante señalar que entre los costumbreros, a pesar de no reconocer al sacerdote católico como la máxima autoridad, admiten y celebran a los santos católicos; llevan a cabo fiestas tradicionales, danzas y sacrificios rituales. Para estas celebraciones existe un complejo sistema de organización, cuya jerarquía se basa en la edad de los participantes: los más ancianos ocupan los cargos más importantes y los jóvenes los de auxiliares. Tienen como lugares sagrados, además de las ermitas y las casas de los "cargueros", las cuevas y las montañas del territorio. 

La religión de los “costumbreros” conserva muchos elementos que pueden considerarse como prehispánicos, persiste la creencia en seres sobrenaturales que son los dueños de la tierra, el relámpago, la lluvia y el viento o que se asocian a lugares específicos, como los espíritus de las montañas, los bosques, las cuevas y los ríos. Algunos de estos seres, por un proceso de sincretismo, se identifican con las deidades del panteón católico, como la virgen María, por ejemplo, Los seres sobrenaturales son caprichosos y generalmente malos, por lo que pueden causar daños o enfermedades; estos deben ser propiciados por medio de rituales mágicos a cargo de los brujos. Las deidades católicas son buenas, pero también deben ser propiciadas mediante la oración y las fiestas conmemorativas. 



9. PATRIMONIO TANGIBLE 





En términos generales, puede decirse que las artesanías de los zoques son variadas y vistosas, incluso que no son propias del grupo, ya que algunas de ellas, como las hechas con madera, se empezaron a manufacturar recientemente en la Casa de la Cultura de Tecpatán. 

En las localidades de Tapalapa y Ocuilapa se elabora alfarería; en Ocotepec se hacen las wacas (canastas de bejuco para lavar los granos de café y cacao), que tienen una gran tradición y se comercializan a través de la Casa de las Artesanías de Chiapas. 

La palma, con la que se fabrica petates y escobas, se trabaja en coapilla. En ocotepec se hacen canastas de mimbre y bejuco, y en tapalapa se elaboran ollas y comales rústicos de barro, principalmente para uso personal. También se conserva en algunos lugares el tejido de hamacas 



10. ECOREGIONES 



En la región habitada por los zoques encontramos tres diferentes zonas ecológicas: la vertiente del Golfo, la sierra y la depresión central. La primera y la segunda zonas corresponden a las llamadas montañas del norte, con altitudes que superan los 2 mil msnm. El clima predominante oscila entre tropical-húmedo y templado. La vegetación original de la sierra estuvo formada por selvas y bosques tropicales, así como bosques de pino-encino-liquidámbar; el paisaje actual se compone de milpas, cafetales, sierras en barbecho, pastizales y tierras inaprovechables como acantilados rocosos y páramos. 

La propiedad de la tierra en los municipios serranos es privada y ejidal. En la primera impera la ganadería extensiva mientras que en los ejidos se practica la ganadería, el cultivo del café y la agricultura de subsistencia. 

La depresión central se caracteriza por altitudes entre 500 y 800 msnm. La vegetación es variable aunque predominan las acacias y los nances en los alrededores de Tuxtla Gutiérrez y los valles de Ocozocoautla y Jiquipiles. Al norte, ya en plena selva de Malpaso, la vegetación corresponde al clima de tipo lluvioso con árboles de más de 40 m de altura. 

El Grijalva es el gran río que atraviesa la zona y en el que a lo largo de su curso se han construido las presas hidroeléctricas de Chicoasén y Malpaso. Aquí, la mayor parte de la tierra es de propiedad privada y está dedicada a la ganadería. Los campesinos de la zona son fundamentalmente agricultores de subsistencia. Los zoques que habitan en las ciudades de Tuxtla Gutiérrez y Ocozocoautla desempeñan trabajos por su cuenta como mecánicos, herreros, comerciantes o empleados a sueldo en el sector de los servicios. 

En la vertiente del Golfo, la zona está cubierta de pastizales para la cría de ganado, propiedad de mestizos. En esta zona se descubrieron grandes yacimientos petroleros que ahora están explotando Petróleos Mexicanos. La población campesina ha sido desplazada de varios lugares y muchos se han tenido que ocupar como peones en las compañías perforadoras. 



11. ORGANIZACIÓN SOCIAL 



Los zoques son un grupo heterogéneo. Aunque en todos los municipios la religión sigue siendo elemento importante de cohesión social, ésta ya no ejerce ningún papel en la administración civil de los municipios. Aproximadamente hasta 1940, el sistema de cargos civil-religioso seguía vigente en la mayoría de los municipios del área; sin embargo, la integración de la región a la vida nacional ha propiciado la diferenciación social en el interior de las comunidades, y los sistemas de autoridades tradicionales han dejado de tener injerencia en la vida política de estos pueblos. 

El ciclo ceremonial tradicional de los pueblos zoques sigue en manos de los sistemas de cargo, de los cuales destacan los mayordomos, priostes, albaceas, rompedores, alférez y fiscales. 

12. INFRAESTRUCTURA 

La amplia red de caminos y carreteras que comunican a los distintos y municipios donde hay población zoque, permiten el flujo de personas y de mercancías en distintos medios de transporte, tales como autobuses, taxis y camionetas de transporte mixto ejidal. 

Las carreteras principales de la región son la de Tuxtla Gutiérrez-Villahermosa, la de Tuxtla Gutiérrez-Tecpatán y la Panamericana. 



La existencia de escuelas es evidente en los municipios con población zoque, incluso en las rancherías más pequeñas se atiende a la población escolar, por lo menos hasta el segundo año de primaria. En los municipios principales se puede cursar la primaria completa y la telesecundaria. Los estudios de bachillerato se pueden realizar en Copainalá, Tecpatán, Ocozocoautla, Tuxtla Gutiérrez y Pichucalco y los universitarios en la capital del estado o en Oaxaca. 

Otra forma de educación no oficial es la que imparte las agrupaciones religiosas, quienes además de predicar la religión, enseñan a leer y a escribir además de algunos oficios. 

Otra infraestructura en los pueblos zoques es la amplia red de Unidades Médicas Rurales del IMSS, localizadas en cada cabecera municipal, donde se atienden las necesidades básicas de salud, como enfermedades gastrointestinales y de las vías respiratorias, así como en las campañas de vacunación y desparasitación que se llevan a cabo periódicamente. 



Para la atención de los indígenas zoques se cuenta, además de las instituciones oficiales ya referidas, con un buen número de médicos tradicionales entre los que pueden mencionarse hierberos y hueseros o sobadores. Los servicios de estos últimos son solicitados sobre todo en situaciones en que los zoques atribuyen el origen del mal a brujería, envidia o mal de ojo. 





13. RELACIÓN CON OTROS PUEBLOS 



El grupo mestizo se caracteriza por acaparar el poder político y económico, dejando a la población indígena los puestos menos importantes. De este modo, es común ver que el presidente municipal, el jefe de la policía, el dueño de la tienda más grande y próspera del cafetalero con más recursos económicos es un mestizo, mientras que los sirvientes, empleados o peones son indígenas. 

El papel de los zoques como campesinos minifundistas, se reduce a ser pequeños productores de granos básicos, café, ganado y algunos productos artesanales, como la alfarería y la cestería. Constituyen también la fuerza de trabajo básica para ganaderos y finqueros mestizos, así como para algunas actividades del mercado laboral en ciudades como Villahermosa, Cancún, Coatzacoalcos y Tuxtla Gutiérrez. 

En las ciudades, los zoques mantienen una constante relación con la población mestiza, en calidad de empleados domésticos, conductores de camiones de carga, etcétera. Esta interacción no les impide seguir reconociéndose como zoques, utilizar su lengua entre ellos o bien acudir a su localidad de origen en los días de fiestas. 

Las relaciones que existen entre los zoques y los miembros de otros pueblos indígenas, principalmente tzotziles son, en general, cordiales; algunos ejidos de los municipios de Rayón, Pantepec y Tapalapa son habitados y usufructuados en común, sin que se hayan presentado dificultades que se puedan atribuir a diferencias étnicas. Por el contrario, los zoques de Pantepec prefieren acudir a los médicos tradicionales tzotziles que a los de su propio grupo. 








TZELTALES
A la llegada de los españoles a Chiapas, en el límite occidental del actual estado, estaban las tribus zoques, en el río Grijalva y las tierras bajas de la depresión central los chiapanecas, y en los altos, al norte y este de la depresión central, vivían las tribus mayenses.
Una expedición española llegó en 1527 a los Altos. Después de vencer a los chiapas, los expedicionarios sometieron a los cacicazgos tzotzil-tzeltales. En 1528 se fundó Ciudad Real, hoy San Cristóbal de Las Casas, lugar de asiento en la región de los nuevos conquistadores.
El sistema colonial se estableció mediante la encomienda y la reducción. Los principales pueblos fueron dados en encomienda a los conquistadores. Al llegar Bartolomé de las Casas a Ciudad Real en 1541 se trató de concentrar a los tzotzil-tzeltales en pueblos o reducciones. Los indígenas, reducidos y encomendados, pagaban tributo dos veces por año, daban prestaciones en dinero, especie y trabajo en minas, molinos, propiedades y casas particulares.
A principios del siglo XVIII, en las comunidades tzeltales de los Altos, se dió una rebelión indígena a partir de un culto oracular y mesiánico. En 1712, el consejo de ancianos de Cancuc llamó a tzotziles, tzeltales y choles a rebelarse contra el poder colonial. En 1713 las tropas gubernamentales sofocaron el levantamiento.
Hacia finales de la década de 1860 surgió una nueva insurrección armada encabezada esta vez por los tzotziles del municipio de Chamula. Entre 1867 y 1870 el culto a un ídolo nativo desató la llamada "Guerra de Castas" o rebelión de Cuzcat, que fue reprimida en 1870. Los vencidos cayeron en la servidumbre como "baldíos". Se veían obligados a trabajar en el campo para el terrateniente, además de servir en su casa como semaneros a cambio de sembrar una parcela y de hacer uso de pastos y bosques de la hacienda.
Los indígenas que se sustrajeron al baldiaje se alquilaban temporalmente como mozos en las haciendas. Al desarrollarse las explotaciones capitalistas en el Soconusco y la Lacandonia surgió la necesidad de mano de obra permanente y temporal. Los cafetaleros y madereros se aliaron a personas influyentes de San Cristóbal, quienes les enviaban contingentes de trabajadores indígenas, surgiendo así el "enganche".
Los enganchadores obligaban a tzotziles y a tzeltales a ir a trabajar a las fincas cafetaleras y monterías. Una vez terminado el trabajo en las fincas, los indígenas volvían a sus comunidades; en las monterías la estancia era definitiva y muy pocos sobrevivían a algunos meses de arduo trabajo.
  • UBICACIÓN GEOGRÁFICA
Se localizan en una franja del Estado de Chiapas al este del territorio Tzotzil, en la parte central del estado, en donde se pueden diferenciar tres zonas naturales: suaves inclinaciones y llanuras en el sur, cimas altas y terreno irregular en la parte central y relieves más bajos hacia el norte.
Desde la década de los 50, población tzeltal empezó a emigrar a la selva lacandona fundando nuevos asentamientos.
Los municipios con mayor superficie son los de Ocosingo, Chilón y Altamirano y los que presentan una mayor concentración de población tzeltal son Chilón, Ocosingo, Oxchuc, Tenejapa y San Juan Cancuc.
  • LENGUA
La lengua Tzeltal pertenece al tronco lingüístico maya. Se caracteriza por ser una de las lenguas indígenas más ricas en su vocabulario; no posee variantes dialectales de importancia, por lo que resulta fácil la comunicación entre miembros de diferentes comunidades tzeltales.
  • VESTIMENTA
Los miembros de cada comunidad tienen una vestimenta propia y distintiva, sin embargo pueden establecerse semejanzas:
La mujer, viste enagua de manta gruesa o de lana, blusa o huipil, de manta, holgado y largo, tejido en telar con bellos bordados multicolores, faja de lana, toca de manta que se lleva doblada en la cabeza, aretes y collares; se peinan con dos trenzas rematadas con listones de colores y andan descalzas.
El hombre lleva camisa y calzón de manta, ahora ya sustituido por el pantalón, chamarro o cotón de lana; sombrero de palma adornado con cintas de colores y sandalias de cuero que los jóvenes sustituyen por tenis.
  • ALIMENTACIÓN
Tradicionalmente, los Tzeltales han sido capaces de producir algunos excedentes de comida. Comercializan este excedente llevándolo al pueblo que es el centro administrativo del municipio. Las mujeres de los parajes remotos en el Municipio de Oxchuc van al mercado semanal – en el pueblo del mismo nombre – donde venden frutas y verduras. Estos mercados rotan, a menudo semanalmente para que cada municipio tenga su oportunidad de comerciar de manera regular. Este comercio, que como he apuntado anteriormente ofrece más que excedentes de comida, es el eje y el alma de la vida económica de todas las comunidades Tzeltales.
Durante las fiestas patronales los tzeltales guisan diversos platillos de maíz: atole agrio con chilito, galletas, tamales y el chilim, una bebida muy rica y nutritiva que se toma al principio de cada comida. Las señoras muelen y muelen maíz para cocinar la comida de cada día de fiesta.
  • TIPO DE VIVIENDA
La casa tradicional tiene paredes de bajareque, piso de tierra apisonada y techo alto de cuatro aguas de palma, zacate o teja, que termina en un remate abierto que permite la salida del humo del fogón. Generalmente son rectangulares, de un solo cuarto con una puerta al frente y ventanas pequeñas. En las cabeceras municipales y comunidades de fácil acceso, se ha extendido la utilización de ladrillos y tejas para la construcción de paredes y techos, y de cemento para los pisos. El mobiliario consiste en bancos de madera, vasijas de barro, metate, trastos de peltre, camas de tablas o petates. Algunas casas cuentan con corrales para los animales y baño de temazcal o push.
  • RELIGIÓN
La vida del grupo Tzeltal está orientada por sus creencias religiosas fuertemente influidas tanto por el catolocismo como por la cosmovisión maya. Está última se expresa en simbolos que unen a los hombres con las fuerzas que habitan el universo.
La religión fusionó elementoscatólicos y mesoamericanos, los Tzeltales, fieles a las enseñanzas de sus antepasados, defienden y cuidan con gran celo sus costumbres y tradiciones. La falta de respeto a sus deidades representados ahora por los santos católicos, puede ocacionarles castigo, según lo demuestren los mitos: por eso, la comunidad trata de congraciarse con ellas al realizar un complejo ritual de acuerdo al calendario religioso anual . La satisfacción divina se procura con oraciones, música, danza, velas, bebidas e incienso
  • FIESTAS PAGANAS Y RELIGIOSAS
De acuerdo con la tradición y las estrategias de preservación de la memoria e identidad, los tzeltales siguen rigurosamente la celebración de un calendario de fiesta y ritual, con que se inicia y concluye el año de cultivo y ofrendas. Aunque la mayor parte de la vida ceremonial comunitaria se organiza en torno a los santos-patrones, para lo cual se cuenta con un complejo sistema de elección y representación de cargos de principales, rezadores o tatik nail (en Tenejapa), así como alcaldes, mayordomos y alféreces que se ocupan rigurosamente de determinadas tareas y rituales. Todos los municipios celebran fiestas patronales a lo largo del año, según se trate de San Juan, en Cancuc, o San Ildefonso, en Tenejapa, entre las fiestas más simbólicas destaca el carnaval de Tenejapa y Oxchuc.
La vida ceremonial comunitaria se organiza en torno a los santos. Las fiestas, organizadas por los mayordomos y sus alfereces, conforman el ciclo anual ritual de la comunidad.
A lo largo del año se celebran fiestas patronales en los municipios tzeltales y tzotziles de Mitontic, Chamula, Chenalhó, Chalchihuitán, Zinacantán, San Cristóbal, Teopisca, Huixtán, Pantelhó, Larráinzar, Venustiano Carranza, Huitiupán, Simojovel, Tenejapa, Oxchuc, Altamirano, Amatenango del Valle, Chanal, Las Rosas, Socoltenango y Yajalón. Destaca el carnaval tzotzil de Chamula, y el tzeltal de Tenejapa, pero su fecha es movible.
  • FUENTES DE TRABAJO
La principal actividad económica es la agricultura. La producción en los altos es raquítica e insuficiente para satisfacer las necesidades familiares, debido a que las tierras se encuentran sumamente fraccionadas y su explotación ha aumentado por el crecimiento poblacional; a lo anterior se suma la mala calidad de las tierras cuyos terrenos son escarpados, deslavados y erosionados. El maíz es el principal cultivo y absorbe el trabajo de casi todo el año. La labranza se realiza mediante las técnicas de roza, tumba y quema, con el auxilio del azadón, arado de palo, machete y hacha. Para complementar los ingresos económicos, los tzeltales se ven obligados a buscar trabajo como asalariados en el soconusco, o a emigrar en forma definitiva, principalmente a la selva lacandona. En la parte baja, de mejores condiciones productivas, se cultiva fundamentalmente café y cacahuate.
  • BIODIVERSIDAD
La región de los Altos de Chiapas se encuentra en la cadena montañosa central, que se eleva hacia el sudeste desde el valle del río Grijalva. Esta zona constituye un macizo montañoso con numerosas cumbres, barrancas y cañadas, y tiene una altura promedio cercana a los 2 000 msnm. La mayoría de los terrenos están formados por laderas, por lo que son poco propicios para la agricultura y la ganadería; además, sufren un severo proceso de erosión. Los ríos de la región son pocos y de escaso caudal; entre ellos sobresale el Amarillo y el Yaxamal.
La vegetación varía de acuerdo al clima y a la altitud. En las tierras altas y frías abunda los bosques de diversas especies de coníferas, mientras que en las partes bajas predomina la selva siempre verde, alternada con sabanas y reductos de bosque.





  • CIBEROGRAFÍA


ZAPOTECOS

Los Binnizá: el “pueblo que proviene de las nubes”
La leyenda más antigua de la tradición zapoteca del Istmo de Tehuantepec nos relata la historia de los antepasados, los BINNIGULAZA.
Los binnigulaza también conocidos como ”padres de la raza”, fueron elegidos por dioses y eran unos hombres gigantes: nacieron las nubes o descendieron del las raíces de los árboles, y además de ser guerreros y sabios, tenían la capacidad de convertirse en animales. Se dice que los binnigulaza no fueron derrotados por los españoles, pues al son de la música y el ritmo de la danza, se dispersaron y se llevaron con ellos la tradición.
En la actualidad no se llaman entre ellos binnigulaza, ahora se autodenominan Binnizá (binni, gente; zá, nube: gente que proviene de las nubes). Para los mexicas, los zapotecos eran los zapotecatl, "gente que proviene de la región de Teozapotlán", o "lugar de los dioses". Los españoles les llamaron sencillamente zapotecos, como se les conoce en la actualidad.
Actualmente conforman el pueblo indígena mayoritario del Istmo de Tehuantepec, y, como macro etnia, constituye el primer grupo del estado de Oaxaca y el tercero del país, después los nahuas y los mayas.
En el año 2000 se registraron 545581 zapotecos en nuestro país, de los cuales cerca de 75 por ciento se concentraban en el estado de Oaxaca; de igual forma un número significativo de población se localiza en Veracruz, Chiapas, Estado de México y Distrito Federal.
Los istmeños son un subgrupo de los cuatro que constituyen una de las principales macro etnias de México junto con los zapotecos originaros de los Valles Centrales, la Sierra Norte y la Sierra Sur.
En el Istmo, donde la población total se calcula en 546 288 y más de 50 por ciento se cataloga como población originaria, 7 de cada 10 hablantes de una lengua indígena se desenvuelven en zapoteco. Así en el Istmo de Tehuantepec cerca de 114 633 son representantes de la “gente de la palabra verdadera”, como también se llama a los zapotecos.
Si bien desde la etnografía y la historia es posible concebir a los zapotecos como un grupo etnolinguístico, los binnizá integran una entidad diferenciada, configurada por la región del Istmo; además tienen una historia, una tradición y un estilo cultural propios. Se distinguen los zapotecos de otras regiones y cuentan con una variante lingüística: el didxazá, término que alude a su origen mítico y que se traduce como “palabra de las nubes”

Mixtecos




1. Introducción
Los mixtecos, son un pueblo multifacético y caleidoscópico, en parte porque viven en una extensa zona geográfica compuesta de muy diversos climas y nichos ecológicos, pero también, porque tienen una conciencia más fuerte de su patrimonio cultural, mismo que les ha permitido cruzar venturosos, no sólo las fuerzas hostiles de la naturaleza en las zonas áridas, sino porque han podido sobrevivir a su muerte emigrar a lejanas tierras del país y en el extranjero; pero siempre manteniendo tozudamente sus valores éticos, morales y espirituales, que los unen a sus pueblos y familias, a pesar del tiempo y la distancia.
Se auto nombran ñuu savi que significa “el pueblo de la lluvia”.
La cultura mixteca es una de las más relevantes de Mesoamérica. Se distingue no sólo por su profundidad y continuidad histórica, sino por ser la fuente de algunos de los códices prehispánicos más importantes que se conocen, y por la extraordinaria calidad de su arte. Las exploraciones en las distintas áreas de la región han mostrado que la Mixteca, al igual que la de sus vecinos zapotecos, era una sociedad compleja. En la época prehispánica, la región se encontraba dividida en señoríos independientes inmersos en una complicada red de relaciones económicas y políticas, que lo mismo incluían alianzas por medio de matrimonios entre miembros de la clase gobernante que enfrentamientos bélicos.
En la actualidad los hablantes de mixteco ascienden a 359 119: en Oaxaca hay 242 050, en Puebla 6 694 y en Guerrero 110 375. Cantidades significativas de hablantes de mixteco se encuentran en Distrito Federal: 12 337; estado de México: 21 278; Baja California: 12 843; Baja California Sur: 1 524; Sinaloa: 3 101. Sin contar a los miles de mixtecos que viven en Estados Unidos, cuya población hablante de este idioma ascendía en 2005 a 410 202 personas.




 Los mixtecos: Una cultura milenaria y diversa
Los mixtecos es uno de los pueblos más antiguos del Anáhuac, sin embargo, se tienen vestigios de su existencia desde hace 8 mil años de historia. Se tiene como dato que en el periodo llamado clásico (200 a C al 850 d C) hubo una gran influencia Tolteca y en el período postclásico tuvo mucha influencia Azteca.
Finalmente el cuarto período, que comprende de 1521 a nuestros días y que es el período colonial. La cultura mixteca es una de las más importantes y representativas del Anáhuac, con impresionantes construcciones en Tilantongo y Tututepec, testimonios en orfebrería como el tesoro de la tumba 7 de Monte Alban o creadores de la mayoría de los códices que han logrado sobrevivir a la destrucción y la rapiña, como el Vindobonensis, Nuttall, Bodley, Selden, Rollo Selden, Teozacualco y Nativitas.
Durante la colonia España extrajo riquezas de México, en primer lugar el oro, en segundo la plata, pero en tercer lugar la grana cochinilla, y la mixteca fue el principal surtidor de tinte rojo a toda Europa durante tres siglos, actualmente trabajan en la hechura de sombreros de palma.
  Ubicación geográfica
Oaxaca es uno de los lugares con mayor riqueza cultural e histórica, la cultura Mixteca se encuentra aquí en Oaxaca pero con la llegada de los españoles  región ocupada por los mixtecos abarca parte de los Estados de Oaxaca, Guerrero y Puebla.
Se divide en Alta y Baja Mixteca, ocupando 189 municipios en el estado de Oaxaca, en los distritos de Huajuapan, Tlaxiaco, Putla, Juxtlahuaca, Nochixtlán, Teposcolula, Jamiltepec y Silacayoapan y 14 municipios más que pertenecen a ocho distritos de Cuicatlán, dos a los de Zaachila, uno a Sola de Vega, dos a Etla y uno a Juquila.


 Lengua
La lengua mixteca es reconocida como una macro lengua quiere decir que existe en forma de distintas variedades debido a la fragmentación del territorio mixteco, el idioma se ha separado en diversas variantes. Esta fragmentación ya se veía cuando llegaron los españoles. Se dice que las variedades del mixteco son seis. PEREl Instituto Lingüístico de Verano) señala que son más de treinta y el Instituto Nacional de Lenguas Indígenas (Inali) define 81 variantes en su catálogo.
La lengua mixteca se deriva del tronco otomangue; que junto con el cuicateco y el triqui forma la familia mixteca. De acuerdo con los datos proporcionados por los lingüistas, existen por lo menos cinco lenguas mixtecas: mixteco de la costa, o tu’un sa’an va’a, tu’un ca’an va’a, tye’enli, o tsa ca’an va’a; mixteco de la mixteca alta llamado también hñuu dabi, sain sau, hñuu davi, ñayuu sau, sañi sau, nchivi savi, tunu’u o tu’u ca’a caji; mixteco de la mixteca baja o ñuu sabi, ñuu savi, tacuate, tu’un davi, ñayiu dau, to’o nda’i o ca’a nda’i; mixteco de la zona mazateca o ña ma ñuu y mixteco de Puebla.
El alfabeto empleado para la escritura de la lengua mixteca es el latino, aunque con algunas diferencias respecto al que se emplea en español. Cabe recordar que varios pueblos mesoamericanos desarrollaron sistemas de escritura propios, con características muy particulares. Uno de estos pueblos fue el mixteco, cuyos códices constituyen una de las fuentes más valiosas para el conocimiento de la historia prehispánica de la región oaxaqueña antes de la llegada de los españoles.

 Vestimenta

La diversidad geográfica y climática de esta región ha dado como resultado una variedad en la indumentaria tradicional. La vestimenta de los mixtecos de la Costa chica de Oaxaca consiste, para la mujer: en una enagua hecha a base de tela tejida con algodón y teñida con extracto de caracol de colores vivos con tonalidades purpúreas, mandil hecho a base de tela de algodón, un huipil hecho a base de tela de algodón y bordado a mano, y una faja con la que se sostiene la enagua. Andan descalzas y tienen un peinado especial que consiste en una especie de trenza anudada en la frente. En los hombres es común usar calzón (pieza parecida al pantalón en la usanza mestiza) hecho a base de tela tejida en telar de mano, el cotón (parecida a la camisa en la usanza mestiza) hecho también en telar de mano, sombreros de lana y huaraches de piel. La indumentaria entre los mixtecos de la Costa representa un acervo maravilloso de expresión artística, heredada de muchos siglos antes de la conquista española, en donde el arte textil indígena de todo nuestro país alcanzó un alto desarrollo. Sus técnicas complicadas y los bellos motivos estilizados que decoran los vestidos, dejan ver rica tradición que se niega a desaparecer aún con la sustitución por telas y decoraciones de tipo europeo o yankee. Gracias a la mezcla de tres razas, en la Costa chica pueden verse distintas formas y colores en la vestimenta de los habitantes.


 
Alimentación
En la Región Mixteca, unión de tres estados: Puebla, Guerrero y Oaxaca, existe una gran riqueza gastronómica. Los más exquisitos platillos, de agrado regional y nacional, manifiestan su esplendor gustativo en la cocina familiar y comunitaria.
De acuerdo a la temporada de lluvias o a la época de sequía, van surgiendo algunos alimentos que complementan la alimentación de los mixtecos. Afortunadamente, la lluvia trae consigo una gran variedad de alimentos nutritivos que surgen del campo.
Desde la época precolombina, la alimentación fundamental de los mixtecos, se basa en el maíz, el frijol, el chile y la calabaza. Posteriormente, en la época de la colonia, se agregaron otros alimentos de origen animal y vegetal de descendencia europea. Uniendo los alimentos de origen mixteco con los alimentos de procedencia exterior, tenemos una gran gama de platillos suculentos. Cabe aclarar que la mayoría de platillos no son de consumo habitual o común ya que solamente se disfrutan en fiestas o adquiriéndolos en el mercado.
En la gastronomía mixteca hallamos la mejor riqueza alimenticia, por ejemplo: las deliciosas tlayudas con asiento, tasajo o manitas de puerco; el inigualable mole negro, el ameno estofado, el agradable coloradito, el deleitable tasajo asado, la encantadora carne enchilada, la fascinante alegría, los maravillosos chiles rellenos, los exquisitos nopales en escabeche; las apetitosas empanadas de flor de calabaza, de queso, de quesillo, de chorizo, con papas y de hongos; la rica barbacoa de chivo y de borrego, el refrescante tejate; las maravillosas aguas frescas de nopal, jamaica, limón, naranja, sandía, horchata, melón, papaya, piña, pitaya, chilacoyote, manzana, durazno, mango, guayaba; la fascinante salsa de panal, el extraordinario pollo enchilado; el típico chile ajo rojo, verde, amarillo y con verdolagas; las atractivas calabacitas con carne de puerco, el estupendo guisado de papas; las incomparables pitayas, los fascinantes codornices asados, la tradicional torta de camarón, las típicas memelitas de frijol, los riquísimos elotes preparados, las fantásticas nieves, los sabrosísimos dulces; la embriagadora mermelada de membrillo, de durazno de jamaica y de tejocote; el extraordinario queso botanero, las apreciables chalupas; los inigualables tamales de elote, de mole, de salsa, de rajas, de dulce, de frijol, de iguana; las apreciables enchiladas rojas y verdes; las entomatadas, las enfrijoladas; las pitahayas, las verdolagas, los quelites, las calabacitas, el chile atole, el champurrado, el atole blanco, el pan de pulque, las palanquetas, las pepitas de calabaza, los tacos tostados, etc. Sin duda, la gastronomía mixteca es una de las más ricas, ya que presenta una gran variedad de alimentos exquisitos, regionales o combinados.


 
 Tipo de vivienda
Su construcción se efectúa con la ayuda de parientes consanguíneos y espirituales, y puede ser en especie o con mano de obra. En ocasiones, cuando las casas quedan vacías, son “prestadas” temporalmente a parientes cercanos. Las viviendas se conforman por varios cuartos separados en donde viven grupos nucleares que, en algunos casos, pueden compartir la cocina o no, según el número de nueras que habiten la casa paterna. En las cabeceras municipales, la influencia urbana se nota marcadamente en los materiales que usan para construir la casa.
Tanto en La Mixteca Alta como en la Baja se usan piedras, adobe sin enjalbe y varas, llamadas jaulillas. En la Alta se ven también casas con muros de troncos o de tablas y techos de tejamanil, de zacate, de hoja de ocote, de maguey, de tejas acanaladas, de láminas de asbesto o aluminio y, en ocasiones, de loza de concreto. Existen aún casas de planta circular en las regiones Baja y de la Costa, aunque es más común encontrar casas rectangulares de 4 x 6 m, usadas como dormitorios, con una pieza más pequeña de cocina. La casa tradicional cuenta con una sola puerta que abre hacia el solar, rara vez a la calle.
 Religión
Los primeros dioses mixtecos: un Ciervo, dios conocido como Culebra de León y la diosa un Ciervo, conocida como Culebra de Tigre. Estas deidades fueron el principio de todas las deidades de los “indios” y fundaron su casa sobre una peña, junto al pueblo de Apoala, en La Mixteca Alta, mencionada como “lugar donde estaba el Cielo”. Esta versión parece basarse en el Códice Apoala o Vindobonensis, que da cuenta del origen del hombre en la región Mixteca. En diversos códices se confirma el origen de los dioses junto con su héroe cultural más importante: Quetzalcóatl, fundador de todas las dinastías mesoamericanas. Tanto en los códices como en la tradición oral se relata la fundación de poblados y el establecimiento de las dinastías a partir de dos elementos principales: los pueblos autóctonos mixtecos y la nobleza surgida de los árboles sagrados de Apoala. No obstante, la gente común del pueblo desconoce los relatos que quedaron en la memoria de los ancianos, depositarios de la sabiduría, y de algunos jóvenes estudiosos de los códices.
A pesar de que los mixtecos accedieron a la adopción de la religión de los conquistadores, aún siguen sacrificando animales en los campos o en lugares sagrados para asegurar la productividad de sus tierras. Los catequistas son los rezadores y también son quienes dirigen los actos del culto católico. Aún se bañan algunos santos en los ríos. Están organizados en mayordomías, cofradías, calendas y convites.

 Fiestas religiosas y Paganas
Hay fiestas civiles relacionadas con el ciclo de vida: bodas, bautizos y funerales; o bien, con el calendario religioso. Las fiestas patronales son las más importantes en cada pueblo, aunque algunas son de carácter general en la región, tal es el caso del Año Nuevo, la Candelaria, Carnaval en Semana Santa, la Santa Cruz, Todos Santos, Posadas y Navidad. Asimismo, destaca el día dedicado a San Marcos, celebrado por todos los pueblos mixtecos. Las fiestas principales en estos pueblos son relevantes porque proporcionan la ocasión para el encuentro de familiares ausentes y presentes y el intercambio con los pueblos circunvecinos.

 Fuentes de trabajo
La Mixteca se caracteriza por una diversificada producción artesanal. Se manufacturan pozahuancos, jícaras, máscaras, jarciería, textiles en algodón y lana como: servilletas, cobijas, huipiles, morrales, ceñidores, refajos, bordados, camisas, cotones, rebozos y enredos de lana, cestería de carrizo y de palma, muebles, velas, cerámica de diversos barros para distintos fines, talabartería, cohetes, cuchillos, herrería, metates, escobas y sombreros finos de palma procedente del Istmo y el resto de palma criolla recolectada en la región. Las prendas textiles y la alfarería son artesaníasque las mujeres hacen en sus tiempos libres. Los hombres se dedican a la jarciería, la herrería, la carpintería, la cuchillería o la talabartería. El trabajo artesanal se realiza en el ámbito doméstico. Los niños comienzan a aprenderlo cerca de los seis años. Por su importancia en la economía regional, el trabajo artesanal de la palma merece una referencia especial. Se fabrican sombreros, petates, tenates, monederos, juguetes, escobas, bolsos de mano, etcétera. Sin embargo las estadísticas dicen que el 70% del los mixtecos está sin empleo los índices de desempleo en la Mixteca son cada vez más alarmantes pues en la actualidad cerca del 70% los habitantes de la región carecen de un trabajo formal  y en su mayoría emigran a otros estados o incluso a Estados Unidos (Norteamérica) para ir en busca de oportunidades.
 Patrimonio tangible
El patrimonio cultural tangible se divide en dos: tangible mueble y tangible inmueble. El patrimonio tangible mueble comprende los objetos arqueológicos, históricos, artísticos, etnográficos, tecnológicos, religiosos y aquellos de origen artesanal o folklórico. El pueblo mixteco conserva aún su patrimonio tangible mueble, ya que aún conservan sus tradiciones como lo son su excelente gastronomía, su vestimenta la cual usan y trabajan para venderla, existen objetos arqueológicos que nos muestran el pasado de esta cultura milenaria.




También está el patrimonio tangible inmueble está constituido por los lugares, sitios, edificaciones, obras de ingeniería, centros industriales, conjuntos arquitectónicos, zonas típicas y monumentos de interés o valor relevante desde el punto de vista arquitectónico, arqueológico, histórico, artístico o científico, reconocidos y registrados como tales. Tenemos en la zona de la Mixteca Alta: la Zona Arquelógica de San Martin Huamelulpam III. Zona Arquelógica de San Martin Huamelulpam II.  Y La casa de la Casica en Teposcolula.

Y en la mixteca baja está la Zona Arqueológica Cerro de las Minas, Huajuapan de León.

FUENTES DE INFORMACIÓN

Ciberográficas

www.cdi.gob.mx

http://www.historiacultural.com/2010/10/cultura-mixteca-mesoamerica.html

http://www.metareligion.com/Religiones_antiguas/Mesoamerica/cultura_mixteca.html

http://www.cumix.org.mx/

Bibliográficas

Raíces Mixtecas
Varios Autores. 285 Pp. Universidad Tecnológica de la Mixteca, Oaxaca, México, 2007.
 Cada año se celebra la Semana de la Cultura Mixteca un punto de encuentro donde convergen investigadores, historiadores, especialistas y estudiosos de una cultura sobresaliente para rememorar el pasado y fraguar el futuro el contenido de esta edición.